En esta web pretendemos explicar qué somos y a qué nos dedicamos las "Operarias Parroquiales", subrayando el carácter laico y secular del Instituto de Magdalena Aulina.

A la vez, presentar el perfil humano y trascendente de nuestra fundadora, la Sierva de Dios Magdalena Aulina. Su carácter emprendedor la movió a fundar el Instituto Secular y a llevar a cabo numerosas acciones de servicio a la Iglesia. Su fama de santidad, que ya la acompañó en vida, culmina ahora en el proceso de la Causa de Canonización.

Ella fué valiente en su tiempo, y no hace mucho de ello. Hoy, sin embargo, la materialidad y la ausencia de valores hacen que la nueva evangelización sea el auténtico reto del presente.

Quizá en algún momento has pensado en mover ficha, en hacer algo..., quizás quieres conocerte un poco más para saber de qué eres capaz. Quizá has dado un paso más y quieres apostar más fuerte. El simple hecho de estar leyendo esta página web, ya dice mucho de tí.

Vamos a hacer una cosa: te proponemos algunas experiencias con el Instituto y te las explicamos brevemente. Si quieres más información, o tienes otra acción que quieras sugerirnos, dínoslo; te escuchamos.

Cuida esa luz que llevas dentro. Si la compartes... nunca se apagará.

Colaborar en América Habrás visto que estamos trabajando en Paraguay y en Puerto Rico. Estamos con los más pobres, en condiciones duras y con pocos medios. Pero Jesús puede llegar a todos los corazones, y nosotras ayudamos a hacerlo posible. El trabajo es duro y nos faltan manos; necesitamos héroes aventureros... ¿te atreves?.

Experiencia de convivencia Te brindamos la posibilidad de compartir unos días con nosotras. Conocerás nuestro estilo de vida. Seguro que tú también aportarás vivencias y compartirás testimonios y cariño. Una experiencia diferente y enriquecedora; un primer paso para conocernos más... y para conocerte más a ti. ¿Te atreves?.

Colaborar en África Habrás visto que estamos trabajando en Butembo (República Democrática del Congo) y de manera itinerante en Gabón y en Guinea Ecuatorial. Es increíble constatar cómo el mensaje de Jesús cala más entre los más pobres. Es muy reconfortante trabajar con ellos, pero también es muy duro. Por eso, nos faltan manos. ¿Te atreves a lanzarte a una aventura como ésta?.